Claude Lelouch tuvo una visión. Cruzar Paris desde Porte Dauphine a Sacre Coeur en una madrugada de 1976 y filmarlo. Aproximadamente 10 kilómetros, Eliseos al principio, serpenteantes en la parte final. Para ello contaba con un único rollo de 35 milimetros de 9 minutos de duración que no dejaba margen para los errores. Presumiblemente un Mercedes-Benz 450SEL 6.9 propiedad del propio Lelouch. “Las artes ya no se pagan” Una cámara sujeta al parachoques y ningún permiso para poder filmar la peripecia. La clandestinidad y un buen manojo de multas ( se pasó por el Arco del Triunfo las normas de circulación y no era ninguna escena controlada) dan caracter y realidad a posiblemente la mejor carrera filmada jamas. Un montaje final cambiando el sonido del coche por un se estima, Ferrari 275 GTV, salvando solo el ruido del derrapaje de las ruedas, completan este film por todo lo demas realidad pura, no hay ningún truco en la velocidad de las imagenes. Ante su estreno Lelouch fue detenido por la policía y afirmó que no conducía él, no se sabe si lo decía de verdad o fue para quitarse algunas de las multas. Fuera quien fuese no lo hacía nada mal y se pudo llegar a la cita.
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